Antonio Silva - Yo no elegí el operático decorado de la cordillera

Yo no elegí el operático decorado de la cordillera
pero
pinté de sal y rosa los Andes
para contemplar en él, el blancor de una patria,
Me vestí con los atavíos de mi madre.
Me saqué los ojos para nombrar
Edipa santificada de coronas
En la ceguera vi a la india que cuelga de mis vértebras,
loca que ejercita en mapuñol
              el celular corro de las soledades.

¿Cómo comprender el pajaral canto de tu boca en el níveo anonimato de las palabras?

¿A quién preguntarle por el sur o el norte?

He inventado una patria para los despatriados,
              mi pequeña ítaca, mi futura lengua” 

Antonio Silva